Tras meses de especulación y muchos rumores, la compañía ha presentado finalmente su nueva línea de baterías, con las que pretenden cambiar por completo la forma en la que dependemos de la electricidad.
El objetivo principal de estas nuevas baterías es abastecer de energía a los usuarios de las mismas tanto a pequeña como a gran escala de una forma económica y responsable con el medio ambiente. Para ello, las baterías de Tesla se encargarán de cargarse utilizando electricidad generada mediante energía solar o con electricidad tradicional cuando el precio es más barato.
El cargador que alcanza los 10 kilovatios hora funciona con energía renovable y costará unos 3.000 euros.
En España, todo el que produzca su propia energía tendrá que pagar por cada kWh que genere, con lo que, aunque las baterías Tesla sirven para almacenar esa energía que generan los paneles solares, en España tendrán un coste, no sólo por el producto, si no también por el hecho de tenerlo.
